Cuáles son los 5 cultivos que requieren más agua para su producción y cuál es su impacto en el medioambiente
Expertos anticipan que la crisis del agua es un problema que involucra múltiples factores. La industria agrícola influye de distintas maneras en este contexto.
El agua es un componente vital tanto para su consumo como para la producción agrícola.
Sin embargo, según un informe de la UNESCO, en todo el mundo 2.000 millones de personas no disponen de agua potable.
Dicha cifra representa a un 26% de la población.
Junto con ello, se tiene previsto que la población urbana mundial que sufre escasez de agua se duplique y pase de 930 millones en 2016 a entre 1.700 y 2.400 millones para 2050.
“La creciente incidencia de sequías extremas y prolongadas también está estresando los ecosistemas, con consecuencias nefastas para las especies vegetales y animales”, aseguran desde la UNESCO.
Distintos analistas han afirmado que la crisis del agua es un problema que involucra múltiples factores. Entre ellos, el cambio climático.
Un artículo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) asegura que dicho fenómeno “está acelerando tanto la escasez de agua como los peligros relacionados con este recurso (como inundaciones y sequías), ya que el aumento de las temperaturas altera los patrones de precipitación y todo el ciclo del agua”.
La agricultura también tiene un rol relevante en este escenario.
Un informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) estimó en 2021 que “a escala mundial, representa el 72% de todas las extracciones de aguas” con fines de riego.
No obstante, el sector también es fundamental tanto para la seguridad alimentaria como para dar trabajo a distintas comunidades.
La técnica de Aguas y Tierras de la FAO, Patricia Mejías, explicó a la BBC que “la agricultura es, por un lado, un creador de este problema del uso poco sostenible del agua”.
“Pero, por otro, es una víctima: cuando no hay agua, no se producen alimentos”, agregó la experta.
En este sentido, enfatizó que “no hay que demonizar los cultivos por su uso de agua sin entender el contexto”.
A continuación encontrarás una lista con los cinco cultivos que requieren más agua para su producción, además de cuál es su impacto en el medioambiente.
1. Arroz
Cifras rescatadas por el citado medio detallan que, entre 2022 y 2023, se produjeron 525,6 millones de toneladas métricas de arroz.
Se trata de un cereal que necesita grandes cantidades de agua.
La organización Water Footprint Network afirma, en base a datos del periodo 2010-2019, que para generar un kilogramo de arroz se necesita una media global de 1.144 litros de agua.
Eso sí, cabe precisar que dicha cifra puede variar dependiendo de factores como el tipo de suelo, el clima y el riego, entre otros.
Los países que más producen arroz se concentran en Asia.
Datos del Departamento de Agricultura de Estados Unidos detallan que, en el periodo 2022-2023, China produjo 144,62 toneladas métricas de arroz.
India generó 137,83 millones, Bangladesh 37 millones e Indonesia 33,02 millones.
El continente asiático también es la zona con menor disponibilidad de agua per cápita en el mundo, según rescata la BBC.
Desde la FAO pronostican que la producción de arroz tendrá un incremento global en el periodo 2024-2025, el cual marcaría un máximo histórico al llegar a las 537 millones de toneladas.
El investigador del Delft Institute for Water Education, Abebe Chukalla, comentó al citado medio que “lo que importa en términos de medioambiente no es solo la cantidad por tonelada (que se produce de un cultivo en particular), sino también la cantidad total”.
“Como el arroz se cultiva mucho y en todo el mundo, es uno de los cultivos que realmente consume mucha agua, con el consiguiente impacto en el planeta”.
2. Caña de azúcar
Desde Water Footprint Network estiman que para producir un kilogramo de caña de azúcar se necesita una media global de 1.280 litros de agua.
La FAO afirma que su producción cuenta “con volúmenes mundiales que superan los 1.500 millones de toneladas desde 2007, elevándose a más de 1.900 millones de toneladas en 2022″.
Este cultivo es la base para producir azúcar refinada, la cual representa un 85% de la producción a nivel global.
Brasil figura como el mayor productor del mundo de caña de azúcar y generó un 38% de la producción mundial en 2022, según la FAO.
Además de la exportación de este elemento en sí, han desarrollado una industria en la que utilizan este cultivo para producir el biocombustible etanol.
El país se ha enfrentado a una intensa sequía que ha favorecido a incendios que, a su vez, han afectado a las cosechas.
A esto se le suma que las consecuencias del cambio climático han contribuido a que se registren inundaciones, como las que se vieron a inicios de este año.
Según datos rescatados por la BBC, el sector agrícola corresponde a cerca de una cuarta parte del Producto Interno Bruto (PIB) de Brasil.
El ingeniero agrónomo que trabajó durante años en investigaciones con la Universidad de Sao Paulo, Fabio Vale Scarpare, aseguró que “la industria de la caña de azúcar está muy preocupada por este tema del agua”.
De hecho, afirmó el experto, el sector “ha estado trabajando para reducir su uso”.
3. Poroto de soja
La producción mundial del poroto de soja se concentra en América Latina y América del Norte, mientras que el principal productor es Brasil.
Dicho país sudamericano cuenta con más de 43 millones de hectáreas para cultivar el grano, según rescata el citado medio.
Luego vienen Estados Unidos y Argentina, en sus respectivos segundo y tercer puesto.
Entre esos tres países generan el 80% de la producción mundial.
Según la FAO, actualmente esta última “ronda los 176,6 millones de toneladas en 75,5 millones de hectáreas”.
Se precisa que la huella hídrica media global de la soja es de 1.600 litros por kilogramo.
De la misma manera, estimaciones con datos del 2011 detallan que la del biodiesel de soja es de 11.400 litros de agua por uno de combustible.
El experto en esta materia, Eduardo Assad, dijo a la BBC que El Cerrado, en la zona central de Brasil, es uno de los sectores en donde se produce este cultivo y en donde, a su vez, las consecuencias de la sequía son más notorios.
Explicó que “la producción de soja y caña de azúcar, por sí sola, no es responsable del aumento de las sequías”.
“La expansión de las áreas productivas, dependientes de la deforestación, en grandes extensiones de tierra es lo que ha estado causando el incremento en la escasez de agua”, subrayó el especialista.
4. Algodón
Las estimaciones de Water Footprint Network afirman que la huella hídrica media mundial del algodón es de 6.055 litros de agua por kilogramo.
Los cultivos, en rama o fibra, se concentran principalmente en India, con un 25% de la producción global.
Después siguen China con un 22%, Estados Unidos con un 15%, Brasil con un 13% y Pakistán con un 4%.
Desde dicho organismo detallan que el tejido fabricado con algodón procedente de India tiene una huella hídrica de 22.500 litros por kilogramo.
Por otro lado, el de Estados Unidos considera 8.100 litros por kilogramo y el de China 6.000 litros por kilogramo.
5. Palta
La palta —también conocida como aguacate— tiene una producción global significativamente menor que la de cultivos como el arroz, la caña de azúcar, el poroto de soja y el algodón.
Sin embargo, desde el Water Footprint Network estiman que requiere una media global de 938 litros de agua por kilogramo.
Asimismo, ciertas zonas en las que se cultiva enfrentan un estrés hídrico considerable, aseguraron a la BBC los especialistas.
México es el mayor productor de este fruto a nivel mundial y, en regiones como Michoacán y Jalisco, se ha denunciado que el apodado “oro verde” está teniendo un costo significativamente alto para las comunidades que viven ahí.
Chile no queda ajeno a esta situación. Aunque el país no es uno de los principales productores globales de palta, sí exporta grandes cantidades a Europa.
El especialista del Instituto de Geografía de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), Ariel Muñoz, explicó a la BBC que este fruto se da naturalmente en zonas tropicales y subtropicales.
No obstante, dijo que el clima de Petorca, en la Región de Valparaíso, está entre el semiárido y el mediterráneo.
Muñoz profundizó en que esto último hace que sus precipitaciones anuales sean más bajas.
Aquello también influye en que se deban usar sistemas de riego para la producción.
La escasez de agua es uno de los principales problemas que enfrenta la zona, la cual no cuenta con glaciares ni demasiada nieve para suplir este escenario.
En palabras del experto de la PUCV, quien ha investigado el uso intensivo de agua de los paltos en la región: “No hay ningún periodo más seco que los últimos 14 años en Petorca”.
“Pese a eso, por años seguimos otorgando derechos de agua y seguimos haciendo crecer la industria no solo de la palta, sino que la industria agrícola en general, no priorizando el uso humano”.
Fuente: La Tercera