Grupo Matte y Angelini vuelcan inversiones a Brasil, mientras gremio maderero acusa crisis local
- Arauco y CMPC proyectan millonarias iniciativas en el extranjero. En tanto Corma reconoce una fuerte caida en la superficie forestal en Chile. Proponen 9 medidas.
Mientras la industria forestal sucumbe en Chile en medio de atentados y roba de madera, hace rato las grandes compañías del sector, CMPC (Grupo Matte) y Arauco (Grupo Angelini) pusieron sus ojos en cl extranjero, Cada una levantará un mega proyecto en Brasil. Sumados ambos totalizas: más de USS7 mil millones.
¿Chile perdió el encanto? A fines de junio de este año, el presidente de CMPC, Luis Felipe Gazitúa, dio una campanada de alerta y explicó la razón del traslado de inversiones forestales a otros países al asegurar que “en Chile es imposible hacer proyectos”,
En una actividad organizada por Irade en la ciudad de Los Ángeles, entregó un dato clave: “una fábrica de celulosa es una inversión del orden de USS4.000 millones. Ustedes comprenden que nadie en su sano juicio va a Iniciar una inversión así cuando el proyecto se puede demorar 14 años”.
Las palubras del empresario -que generaron críticas del ministro Mario Marcel- son el reflejo de lo que ocurre en una industria que en Chile ha caído sostenidamente desde cl año 2018, con menos plantaciones, cierre de operaciones y pérdida de empleos,
El encanto de Brasil
Los capitales buscan su propio camino y tanto Arauco como CMPC ya no miran tanto a Chile. Los expertos sostienen que buscan mejores entornos para aprovechar el alto precio de la colulosa.
“El crecimiento de estas empresas y sus planes de inversión en nueva producción indudablemente están enfocados hacia el exterior, particularmente en Brasil. Para Arauco, el proyecto Sucurlú y para CMPC, el proyecto Natureza implicarán que, de materializarse y sin la entrada de nuevos proyectos relevantes de celulosa, estas empresas se posicionarán en el podio de las principales empresas productoras de celulosa a nivel global, después de Suzano (mayor productora mundial radicada en Brasil)”, comenta el analista de Bci Corredor de Bolsa, José Ignacio Pérez.
Con Sucurú, la empresa presidida por Matias Domeyko pondrá sobre la mese USS3.000 millones en un mega proyecto en Mato Grosso do Sul que va cuenta con el visto bueno del gobierno estadual.
Previamente, la misma firma desarrolló una mega operación en Uruguay junto a la sueca Stora Enso, llamada Montes del Plata. Ahí, la inversión fue de US$2.270 millones y el proyecto comenzó a operar el 10 de julio de 2014.
En el caso de CMPC, la forestal del Grupo Matte desarrollará la inversión chilena más grande en el extranjero. Pondrá sobre la mesa más de US$4.500 millones para levantar Natureza. La compañía llegó a Brasil en 2009 y ya cuenta con una mega operación en Porto Alegre (Guaíba)
“En el futuro, el gran proyecto de ambas compañías se relaciona con grandes plantas de celulosa en Brasil y eso se atribuye a que, para dicho país, el sector forestal es estratégico y los estados y municipios están Interesados en apoyar a las empresas para que desarrollen proyectos, ya que se traducen en beneficios directos. Además, los plazos para hacer realidad proyectos de envergadura son menores que los que se observan en Chile”, explica el gerente de Research de Renta Variable de Credicorp Capital, Rodrigo Godoy.
Chile se derrumba
En 2018, esta industria representaba el 2,1% del PIB nacional, exportando USS6.838 millones. En tanto, el año pasado solo representó el 1,6% del producto, con envíos de US$5.556 millones,
Según comenta el presidente de la Corporación Chilena de la Madera (CORMA), Juan José Ugarte, en los últimos 10 años se han destruido 320 mil hectáreas, alejándonos de la meta de la carbono. neutralidad.
En concreto, “La superficie de plantaciones forestales ha disminuido un 14% entre los años 2013 y 2023; la superficie anual forestada ha disminuido un 99% en los últimos 17 años y, de acuerdo con la Corporación de Bienes de Capital (CBC), dl sector forestal no tiene proyectado materializar inversiones relevantes en el próximo quinquenio”, dice el líder gremial.
La última mega inversión forestal en Chile fue el proyecto MAPA de Arauco en la Región del Biobío. El Grupo Angelini puso sobre la mesa más de US$2.800 millones para la construcción de la planta de celulosa más grande de Chile que entró en marcha en 2022.
Un año más tarde, Arauco vivió momentos complejos en Chile: “El año 2023 también enfrentamos decisiones difíciles, como la detención de la operación del Aserradero Horcones 1, debido a la baja en los mercados y los mayores costos en cl abastecimiento de materia prima. Por otro lado, en agosto fue suspendido indefinida mente el proceso de fabricación de celulosa en la Planta de Celulosa Licancel”, comentaba en la última memoria de lo compañía, su expresidente, Manuel Bezanila.
Pero eso es solo la punta del iceberg de una industria que está compuesta por un centenar de pequeñas y medianas empresas madereras que aprovechan la cadena de valor de las grandes forestales que hoy se aferran a otros mercados.
Los atentados, el robo de madera, los incendios forestales y la denominada permisología han golpeado duro a las forestales. Mientras la economía chilena creció un 1,5 anual en los últimos años, la actividad industrial forestal disminuyó un 8,6% anual en promedio para el sector celulosa y un 7,8% anual en promedio para el sector industrial de la madera. Esas cifras contrastan con el actual momento de que viven otros países,
“La industria forestal se encuentra en pleno proceso de madurez en Uruguay y en Brasil, y despuntando en Colombia. En cambio, en Chile tenemos fuertes desincentivos. Uno asociado a los sobrecostos: hoy tener un seguro en el sector (forestal es inalcanzable para los pequeños productores, por ejemplo”, comenta Ugarte, quien sostiene que en los últimos años el sector ha sufrido la pérdida de 3.200 empleos al año (promedio 2012 y 2022) y la desaparición de 200 aserraderos.
Las 9 medidas de Corma
Corma realizó una serie de propuestas al Gobierno para reflotar la industria. Entre ellas está la recuperación de las 100 mil hectáreas quemadas, fomentar la forestación para alcanzar 1000.000 de hectáreas de bosques adicionales a 2049, modificar el proyecto de ley para fortalecer la prevención, combate de incendios forestales, entre otros.
Fuente: Edición suscripción de La Segunda