Chalecos encontrados podrían ser decisivos en investigación del homicidio de carabineros en Cañete
- Además de los chalecos, se encontraron dos radios portátiles y cajas con elementos disuasivos, ocultos entre matorrales cerca de un estero de difícil acceso, aproximadamente a un kilómetro de donde ocurrió la emboscada.
En un giro significativo para la investigación del asesinato de tres carabineros en Cañete, Región del Biobío, el fiscal Roberto Garrido informó sobre el reciente hallazgo de chalecos antibalas y otros elementos pertenecientes a las víctimas. Los objetos fueron descubiertos en la comunidad Nicolás Calbullanca, a unos 30 kilómetros del lugar del ataque.
Durante la noche del jueves, efectivos de la Policía de Investigaciones localizaron los chalecos de Carlos Cisterna, Sergio Arévalo y Misael Vidal, quienes sufrieron una emboscada en abril de este año. Los policías fueron heridos de bala y sus cuerpos incinerados en la camioneta en la que patrullaban.
Además de los chalecos, se encontraron dos radios portátiles y cajas con elementos disuasivos, ocultos entre matorrales cerca de un estero de difícil acceso, aproximadamente a un kilómetro de donde ocurrió la emboscada.
El fiscal Garrido destacó que la ubicación de estos objetos fue posible gracias a la colaboración de la comunidad local. A pesar del progreso en la investigación, el armamento y las municiones de los carabineros, incluyendo subametralladoras uzi, aún no han sido recuperados.
El Labocar de Carabineros Biobío y personal del OS9 se encuentran trabajando en el sitio del hallazgo, junto a un equipo multidisciplinario liderado por el fiscal regional de la Araucanía, Roberto Garrido. Se ha confirmado que los chalecos corresponden a los que portaban los funcionarios asesinados, y uno de ellos presenta intentos de destrucción, posiblemente quemaduras.
El subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, expresó su valoración por los avances en la investigación, que espera permitan esclarecer completamente el caso y establecer las responsabilidades penales correspondientes. Los hermanos Felipe y Yeferson Antihuén, junto a Nicolás Rivas, se encuentran en prisión preventiva acusados por el triple homicidio, mientras que Tomás Antihuén sigue prófugo. Según el fiscal Garrido, no hay indicios de que haya abandonado el país.
Este descubrimiento representa un paso importante en la resolución de un caso que ha conmocionado a la opinión pública y ha puesto en relieve los desafíos de seguridad en la región.